Este piano ya no canta
desde que tú lo bautizaste
está pobre de alma
y ya no tiene corazón.
Dale un poco de tu vida
dale un corazón de los que tú haces
de papel y de hojas secas
invéntale una redención.
Este piano ya no habla
ni siquiera dos notas
ponle otro nombre
con hache que no es muda.
Este piano no te tiene
y necesita tus huellas
unos acordes mal hechos
de los que tú sabes tocar.
Este piano ya no tiene ni la noche
se ha gastado hasta mis huellas
no te tiene y necesita urgente
el bolero de los dos.
24.06.11.
Dedicatoria: obvia/omitida.